La pandemia del Covid-19 ha supuesto un punto de inflexión en nuestras vidas. Sin duda alguna está siendo una experiencia terrible dadas las cifras que, asombrados, vemos día a día en los telediarios.
A pesar de todo el temor que nos infunde la crisis sanitaria global, la economía ha tenido que seguir su curso, pues las facturas no han parado de llegar en tiempos de pandemia.
Oficinas, talleres, bares y comercios, han tenido que seguir el curso de sus negocios, con el temor de sufrir contagios entre los empleados, clientes y visitantes.
Esta dicotomía entre el resguardo en casa y la necesidad de seguir trabajando de la manera “más normal posible”, ha llevado a cambiar la arquitectura de nuestros espacios de trabajo: Las esmeradas decoraciones de tiendas y oficinas se han visto empañadas por barreras visuales, mamparas de oficina y decenas de carteles de advertencia.
No hay otra opción que acoplarnos a esta “nueva normalidad” y adaptar nuestros espacios de trabajo a las medidas sanitarias necesarias.
Mientras muchos negocios improvisan mamparas de oficina caseras que afectan la estética, otros más previsivos han puesto grandes esfuerzos en proteger a sus clientes, empleados, proveedores y visitantes.
Las oficinas del 2020 y años sucesivos son espacios diferentes. Muchas oficinas no han querido hacer construcciones definitivas, con la esperanza que pronto se acabe la crisis mundial.
Sin embargo, la improvisación de mamparas de oficina desechables o carteles escritos a mano, dan una mala impresión a nuestros visitantes. Sin contar el aspecto más importante: La protección de estas improvisadas barreras no está 100% garantizada.
Las soluciones anti Covid más eficientes
La Organización Mundial de la Salud y distintas organizaciones médicas, han hecho serias recomendaciones sobre la bioseguridad ante la pandemia.
Los negocios de atención al público, comercios y oficinas, están sujetos a inspecciones sanitarias de comprobación de medidas anticontagio. Estas inspecciones, pueden acarrear grandes multas e incluso el cierre del local.
Bien sea por temor a las multas o por una verdadera concienciación de los efectos de la pandemia, los negocios parecen haber asumido la necesidad de protección.
Otro aspecto de suma importancia, es que los clientes tienden a huir de aquellos locales que no cumplen con las medidas anti Covid, con una gran afectación en la caja.
Debemos estar atentos a las soluciones más eficientes, estéticamente armónicas y con los mayores niveles de seguridad biológica.
La protección integral: Una estrategia ganadora
La protección ante los riesgos de la pandemia, se basa principalmente en tres niveles de bioseguridad:
Barreras físicas que impiden la propagación del virus
La OMS asegura que la instalación de barreras físicas de protección, es una de las medidas más eficientes para evitar la propagación del virus.
Los prestadores de servicios, deben establecer barreras físicas entre el personal del establecimiento y los clientes.
Del mismo modo, la transmisión del virus entre cohabitantes de un mismo espacio de trabajo, se debe eliminar con este tipo de barreras.
Las mamparas divisorias para oficina, de áreas de atención al público, zonas comunes, áreas de reuniones o sociales, son imprescindibles. Estas mamparas, entre otras cosas, deben ser:
- Permitir la visualización al 100%.
- Establecer una barrera de choque al virus, no ser porosas o abiertas.
- Deben ser totalmente lavables e inmunes a la acción de lejías y químicos de limpieza.
- Estéticamente armónicas con la decoración general.
- Tener las medidas adecuadas.
- No suponer riesgos de caídas, desprendimientos u otros daños.
- Ser seguras con el mobiliario de oficina.
Las soluciones químicas para la eliminación del Covid-19
Se ha probado científicamente que el virus del Covid 19, es sensible a la acción de algunos elementos químicos.
El uso de lejías y otros detergentes químicos ha sido probado como efectivo para la limpieza de superficies, incluyendo mamparas de oficinas y barreras.
El gel hidroalcohólico, alcoholes y otros detergentes como el jabón común, han sido eficientes para eliminar trazas del virus en manos y otras zonas del cuerpo.
El mobiliario de oficina debe ser resistente al uso de estos agentes y además se deben instalar en todas las zonas de trabajo, dispensadores de gel alcoholado para el uso de trabajadores, visitantes y clientes.
La prevención de riesgo
La mejor solución contra la pandemia, es la prevención del riesgo. Es crucial respetar las normas y recomendaciones oficiales.
Las regulaciones en cuanto a la distancia social, aforo en espacios cerrados o abiertos y el contacto interpersonal, se han hecho bajo rigurosa supervisión de expertos sanitarios.
La ventilación natural debe favorecerse y se debe tener la posibilidad de poder permitir la circulación del aire en las áreas de trabajo.
Siguiendo las recomendaciones de los expertos, apelando al sentido común y tomando las medidas de bioseguridad necesarias, podemos ofrecer a nuestros empleados, compañeros y clientes, un ambiente seguro y totalmente libres de COVID.
